lunes, 23 de noviembre de 2009

Hornada de huesitos de santo

Que rápido pasa todo, demasiado, uno meté los huesos de santo para que se cuezan en el horno y al sacarlos se da cuenta que casi un mes ha desfilado por delante de sus narices, ¡y los huesitos ni siquiera se han pasado! "Halloweeennnn, halloweeennnnnnnn...." asi a lo Glenn Danzig con sus inigualables Misfits.

Pues esta hornada como podeis ir entreviendo tiene cierto regustillo tétrico, y no porque el repostero mayor sea un reconocido freaky del mundo de las tinieblas o se haya dado a la moda gótica más radical (no será por oportunidades que tuvimos el fin de semana de la moda gótica rondando por estos lares), no, simplemente es que venimos a reivindicar los huesos de santo y los buñuelos frente al "truco-trato" de nuestros amigos "gringos". Y lo vamos a hacer en un medio donde ahora, esta vez si, se nos reconoce a nivel mundial, en el cine de terror. Y si no, que se lo pregunten al Sr. Balaguero que puede ser poniente en diversos masters tras su dilatada trayectorias en el mundillo; Los Sin Nombre, Darkness, REC, REC2...buena ristra de gritos a sus espaldas.

Sin embargo, como dejabamos entrever antes, esta vez nuestra hornada tiene un toque añejo. Si, porque mucho antes, alla por la decada de los 70, un señor llamado Narciso Ibañez Serrador sento catedra en cine y television con peliculas, telefilmes y series por doquier dejando a los espectadores helados de miedo. Esta semana, he tenido la suerte de poder ver dos de esas peliculas y solo puedo mostrar admiración por un adelantado a su época, un genio que incluso en un contexto politico-social tan complejo fue capaz de rodar en inglés con actores extranjeros para evitar la censura y poder dar rienda suelta a su talento. Si no han podido disfrutar jamas de su cine, no pierdan el tiempo e intenten encontrar "Quien puede matar a un niño" (Killers Playground) y "La Residencia". No dejen amedrentarse por la estética y baja producción de las peliculas y miren mas allá. Con total seguridad quedarán enganchados por ambos trabajos, y sobretodo, sorprendidos de encontrar ciertas situaciones en ese tiempo. Sin igual, un genio.

...y poco mas, por hoy. Esperamos aumentar la productividad del horno poco a poco, si no nos va a salir por un ojo de marfil, oiga.

Tralaritralari!

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